eres preciosa en cuerpo y alma.
Eres la sirena de mis poesías.
La que contempla las estrellas
en trasnochadas noches de verano;
sentada en una roca
mirando la plateada luna
esperando el amanecer,
para sumergirte en el mar y danzar sobre las olas.
El mar te quiere tanto como yo,
y cuando caminas por sus playas
te regala las pulseras y zarcillos
que los bañistas se han dejado en la dorada arena;
y una blanca ola de espuma los deja para ti.
Tu tía que te quiere y te adora Eva Ramona Martínez.
Cuadro: la sirena de Fernando Fonseca. (Óleo)
Tía que poesía tan bonita, me ha llegado al corazón, tu y yo sabemos lo que nos gusta el mar.
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